¿Tijera contra el INAMU? Mal para los derechos de las mujeres

¿POR QUÉ QUIEREN CERRAR EL INAMU?
Albino Vargas Barrantes *

“Nuestra” Asamblea Legislativa sí que es, en verdad, una caja de sorpresas. Fíjense que ponemos la palabra “nuestra” entre comillas, porque la verdad sea dicha: el parlamento costarricense muestra, cada vez más, una pronunciada lejanía con respecto a los verdaderos sentimientos y las reales necesidades de la gente, del pueblo, de la ciudadanía. Si no, ¿cómo podemos interpretar la descabellada idea de darle un “golpe de Estado” presupuestario al Instituto Nacional de las Mujeres (INAMU), reduciéndole, radicalmente, el aporte que hace posible su existencia?...

El INAMU, hasta hoy, se financia con recursos provenientes del Fondo de Desarrollo Social y Asignaciones Familiares (FODESAF). Una reforma a esta ley se tramita para que tal aporte se reduzca del 2 % al 1 %. Quienes están proponiendo esta modificación legal, violentan, radicalmente, la razón de ser del INAMU, cual es la de “promover y tutelar los derechos humanos de las mujeres, para contribuir con la construcción de una sociedad más justa e igualitaria que garantice la equidad de género”. El poquito de democracia real que había llegado a las mujeres, a través del INAMU, está hoy en peligro.

Lo realmente impresionante es que la señora diputada que pretende ser la nueva Defensora de los Habitantes de la República, esté respaldando esta irracional iniciativa, ó, más bien, sea proponente y/o “defensora” de este ataque a la institucionalidad de la política pública a favor de los derechos de las mujeres.

Y aquí es bueno lanzar un fuerte emplazamiento al propio Presidente Arias, amo y señor de vidas y haciendas en el ámbito de la política tradicional del país y en el mismo ámbito de quienes juegan a hacerle oposición; para que él le diga a la gente, sobre todo a las mujeres, que si él dejará entre sus legados, el cierre del INAMU a corto plazo.

Este zarpazo presupuestario al INAMU llevará a la suspensión total y/o a la reducción drástica de una amplia gama de servicios institucionales, vitales en el campo activo de la defensa de los derechos de las mujeres. Veamos: Se cerrarán los albergues temporales para mujeres en riesgo de muerte; se pone en peligro la atención psicológica, social y legal para las mujeres; desaparecerán importantes procesos de formación humana de las mujeres en condiciones de pobreza, así como procesos de capacitación y asesoría a las mujeres para el ejercicio de sus derechos, a nivel nacional, regional y local. Igualmente, será dramática la pérdida de procesos de acompañamiento a las mujeres y a sus organizaciones que, en contexto de crisis económica, llevan ingresos a sus familias con pequeños emprendimientos productivos.

Como siempre, las reducciones presupuestarias en programas de política pública del ámbito social, siempre han de golpear a los sectores más vulnerables dentro de los vulnerables: la gente pobre y, particularmente, dentro de éste grupo, a las mujeres; doble y triplemente castigadas por el entorno creciente de desigualdad y de exclusión social. Son las mujeres las que viven con más intensidad los efectos de la pobreza, de la violencia y de la discriminación.

Alzamos nuestra voz de protesta. Manifestamos nuestro rechazo tajante a la agresión que se quiere efectuar en contra de las mujeres y de su institución emblema: el INAMU.

Bien dice el manifiesto de la Asamblea de Trabajadoras y de Trabajadores del Instituto Nacional de las Mujeres que “es contradictorio que nuestros gobernantes hablen de justicia y de derechos a nivel externo, mientras que en el país pretenden aprobar leyes que desprotegen y golpean a las mujeres”… Sería sumamente oportuno que las personas aspirantes a la Presidencia de la República, entre ellas la distinguida dama y mujer afortunada, doña Laura Chinchilla, dieran su parecer al respecto.

De la manera más respetuosa pero igualmente vehemente, hacemos una fuerte exhortación a los honorables señores diputados y a las honorables señoras diputadas, de todas las fracciones parlamentarias, para que rechacen el ataque artero que se le pretende hacer al INAMU. Todo lo contrario, se necesitan leyes que a este tipo de institución y a otras de similar naturaleza, las revitalicen, las fortalezcan, las vuelvan estratégicas, no ya solamente en la atención de la pobreza; sino a algo de mayor impacto en el desarrollo de nuestra democracia: el combate a la desigualdad y a la exclusión social.

* Secretario General Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP)

DIARIO EXTRA, Costa Rica, 5 de Agosto de 2009
http://www.diarioextra.com/2009/agosto/05/opinion03.php