Patronato emitió 33.600 medidas de protección en el 2008
PANI atiende más de 90 casos diarios de violencia contra niños
Menores de edad son víctimas de abusos físicos y negligencia
En ocho de cada diez casos el agresor es un padre o familiar del pequeño
Alonso Mata B.
amata@nacion.com
El Patronato Nacional de la Infancia (PANI) atiende, en promedio, 92 casos diarios de violencia física y emocional contra los menores.
Golpes, gritos, abandono y castigos desmedidos son tan solo algunas de las formas de abuso que figuran en los cuatro expedientes que tramita cada hora la institución, según sus propios datos.
En ocho de cada diez casos el agresor es un padre o familiar del infante.
Luis Rojas, asesor legal del Patronato, explicó que en los casos donde se detecta el abuso, la entidad dicta diversas medidas de protección en favor del menor.
Se pretende, añadió, frenar la agresión y garantizar la seguridad del niño.
El año pasado, el PANI emitió 33.600 acciones para proteger a poco más de 26.000 niños. En algunos casos, hay infantes con más de una medida.
Cuando el PANI corrobora que corre peligro la vida del pequeño, tiene la potestad legal de separarlo de sus padres y albergarlo en hogares sustitutos regidos por el Patronato.
Tal es el caso de una bebé de un año de apellido Zelaya, quien era agredida por su padres desde que tenía siete meses.
Sus agresores fueron detenidos por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) el pasado 21 de agosto.
La menor presentaba golpes en la cara, lesiones en el hígado y el desprendimiento de varios dientes.
La niña se encuentra ahora está bajo la protección del PANI y reside en uno de sus albergues.
En la actualidad hay 4.800 menores de edad en la misma situación de la pequeña Zelaya. En los hogares sustitutos supervisados por el Patronato hay bebés recién nacidos, chicos con discapacidad física, muchachos de 17 años, y grupos de hermanos hasta de cinco integrantes.
Trabajo familiar
Luis Rojas indicó que el PANI recibe poco más de 30.000 denuncias al año por irrespeto a los derechos de los niños.
Cada expediente es valorado por sicólogos, abogados y trabajadores sociales de la institución.
“Tampoco es intervenir por intervenir, debemos estar seguros de que la denuncia tiene fundamento”, detalló Rojas.
Según explicó, el objetivo del Patronato no es apartar a los niños de los padres, por el contrario, es garantizar que estos crezcan en un hogar seguro y con amor. La institución incluso dicta medidas dirigidas a los padres de familia con la finalidad de que cambien hábitos inadecuados.
Por ejemplo, si una madre es alcohólica, el PANI emite una resolución tendiente a que esa persona reciba tratamiento médico y pueda superar su adicción.
“La idea es que los niños estén con sus padres; cuando esto no se puede, buscamos alternativas dentro de su núcleo familiar, con abuelas, tías o hermanos”, narró.
Estadísticas
El año pasado la mayor causa por la cual debió intervenir el Patronato Nacional de la Infancia fue por conflictos familiares. Se tramitaron 16.400 expedientes. Se trata de casos en donde hay violencia intrafamiliar u otras situaciones de abuso.
El segundo motivo fue la negligencia, con 5.300 casos. Dentro de estos expedientes destacan padres o familiares que no cuidaban adecuadamente a sus menores, los dejan solos o vulnerables ante situaciones de riesgo.
En el tercer lugar se ubicaron las denuncias por maltratos físicos con 2.195 casos.
LA NACIÓN, Costa Rica, 6 de Septiembre de 2009
http://www.nacion.com/ln_ee/2009/septiembre/06/pais2079804.html
Hospital de Niños alerta por aumento de maltratos
Alonso Mata B.
amata@nacion.com
Autoridades del Hospital Nacional de Niños lanzaron una alerta por el aumento de violencia infantil registrado en el país.
Mientras en los primeros años de la década el centro médico atendía un promedio de dos casos diarios de niños agredidos, ya para este año la cifra se triplicó.
Por ejemplo, solo en agosto se registraron 186 menores de edad víctimas de agresión. Fracturas, quemaduras, traumas en la cabeza y abuso emocional son los principales males que presentan los niños agredidos.
También se reportan abusos sexuales e incluso heridos por balas perdidas. De igual forma hay un alto número de accidentes que sufren los menores de edad producto de la negligencia o desatención de sus padres.
Cada uno de estos casos es investigado por trabajadores sociales del centro médico.
Orlado Urroz, subdirector del Hospital de Niños, explicó que este fenómeno “solo es la punta del ice berg”, ya que estos son solo los casos que requieren de atención médica. A su criterio el maltrato infantil es un mal creciente, un síntoma social de un entorno carente de valores y oportunidades y lleno de desigualdades.
Cuestión social
Para Urroz, la crisis económica que afecta al país desde el último trimestre del año pasado es una de las causas que explica el aumento de la violencia.
“La falta de dinero, no poder solventar las necesidades económicas, genera una desesperanza, una rabia que se traducen en violencia contra los más vulnerables”, opinó.
Aunque el experto destaca que en los hogares de nivel socioeconómico bajo es más fácil que explote la violencia, advierte que este fenómeno no respeta clase social.
“Se requiere no solo apelar a los valores familiares, sino a la comunicación asertiva, a una sociedad más justa, más igualitaria”, indicó el médico.
LA NACIÓN, Costa Rica, 6 de Septiembre de 2009
http://www.nacion.com/ln_ee/2009/septiembre/06/pais2079809.html
viernes, 11 de septiembre de 2009
Niños y niñas: víctimas de la decadencia irreversible de la familia patriarcal
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario